Historias sorprendentes de vida. Esas aventuras que nos brinda nacer. esas que narran tristeza, pena, dolor, nostalgia o melancolía. Alegría, orgullo, esperanza, virtud o resignación. Son el amor. Dia a dia diseñando la arquitectura, de esas experiencias que nos apasionan, ilusionan y enamoran.

Encontrar en el camino a fulano o zutano, quizá acompañados de merengano siempre será un placer, pues es recurrente, que nazcan hermosas anécdotas e historias, en los lugares menos sospechados. Son de esos y aquellos que toman la decisión de salir de la fila, mirar al horizonte, y sin rumbo crear las decisiones de pocos o muchos años que nos gusta escuchar.

Y la principal responsabilidad que heredamos al momento de escuchar. Es convertir el suspiro de vivir, en una merecida causa para inspirar a esos que vendrán luego, Y hacerlo aún mejor. Mejorar y mostrar maravillas insospechadas, es la búsqueda coincidente con percepción sorteada al azar.

Estamos rodeados de oportunidades cada dia de hacerlo mejor que ayer.